CLÁSICOS ITALIANOS
Fotografía: Juan Retallack
Por: Israel Vázquez
Negroni
La Florencia de la segunda mitad del siglo XIX se convirtió en una urbe cosmopolita que reunía a aristócratas, intelectuales y artistas de distintas partes del mundo en sus calles. En ese entonces, los cafés empezaron a popularizarse, posicionándose como un importante punto de encuentro entre la sociedad florentina. Personaje importante de aquella época era el conde Camillo Negroni, quien disfrutaba de tomar Americanos —coctel compuesto por Campari, Vermouth Rosso y soda— en el popular café Casoni.
Un día, el Conde sintió ganas de experimentar, así que decidió pedirle al barman, Fosco Scarselli, que le preparara un Americano más fuerte de lo normal. Scarselli reemplazó la soda por ginebra, consciente de la herencia inglesa que el conde tenía por parte de su madre. Así, este aperitivo nació, convirtiéndose en un imperdible del bar y posteriormente uno de los cocteles más populares del mundo.
Receta:
1 parte de Campari
1 parte de Cinzano Vermouth Rosso
1 parte de Bulldog Gin
Se decora con una rodaja de naranja
Aperol Spritz
Si bien la segunda mitad del siglo XIX representó prosperidad para algunas regiones de la península itálica, la primera trajo consigo violentas invasiones. Una de estas fue la del Imperio Austrohúngaro, cuyas tropas ingresaron a la parte norte de la región por aquellas épocas. Al encontrarse con los amargos licores italianos, comenzaron a rebajarlos con un chorro de soda o prosecco. A esta práctica se le empezó a conocer como spritz, derivada del alemán spritzen: que significa salpicar, y terminó por esparcirse por toda la península.
A esta historia debemos sumar la del propio Aperol, que fue ideado por los hermanos Barbieri en la empresa de licores de su padre. Este aperitivo italiano adquirió popularidad en los años posteriores a la Gran Guerra en cafés y bares de Padua y Venecia. Para la década de los 50, el spritz alcanzó a este gran aperitivo, naciendo así el coctel insignia de los veranos en el Mediterráneo.
Receta:
1 parte de Cinzano Prosecco
1 parte de Aperol
1 golpe de soda
Se decora con media rodaja de naranja
Coctelería: Ricardo Alaniz de Carlotta Reforma
Locación: Carlotta Reforma en The Ritz-Carlton