CHÂTEAU LACOSTE: LA INTIMIDAD DE UN SUEÑO PROVENZAL
Por: Sarah Gore Reeves
Fotografía: Andrew Pattman
Cuando conduje hasta Château La Coste hace dos años, estaba claro que no se trataba solo de visitar unos viñedos, este es un lugar como ningún otro. La finca es una colección de land art y arquitectura contemporánea. Cuenta con un par de cavas de 10 metros de altura semicilíndricas, tipo hangar en aluminio brillante, diseñadas por Jean Nouvel. También alberga un centro de arte en forma de V en hormigón crudo y vidrio, con piscinas reflejantes creadas por Tadao Ando. Frank O. Gehry muestra su talento con un pabellón musical con vigas de madera, mientras que Renzo Piano convirtió un granero desmontado en un pabellón de exhibición de vidrio y concreto semienterrado en el suelo. La colección de arte incluye Small Crinkly de Alexander Calder, un móvil estable de acero pintado, instalado en el Centro de Arte Château La Coste; AIX, de Richard Serra; La araña en cuclillas suspendida en el agua, de Louise Bourgeois; la escultura matemática Infinity, de Hiroshi Sugimoto; Wall of Light Cubed, un cubo rectangular de mil toneladas creado por Sean Scully, y la instalación Ruyi Path de Ai Weiwei, entre otras piezas inéditas.
El terreno de 200 hectáreas fue adquirido en 2002 por el irlandés Patrick McKillen, un coleccionista de arte, hotelero y magnate inmobiliario. En 2004 McKillen invitó a conocidos artistas —a los que hoy llama amigos— para elaborar obras que tuvieran cierta relación con el paisaje. El arquitecto André Fu se encargó de diseñar el spa, el restaurante, el bar y el salón del hotel boutique. Château, Villa La Coste, abrió sus puertas en 2017 y se encuentra sobre una colina repleta de jardines con vistas panorámicas al valle de Luberon y al monte Ventoux. En la actualidad ha ganado la distinción oficial de Francia de “Palace Distinction", lo que significa que el nivel es superior al de un hotel cinco estrellas.
El ambiente es relajado e íntimo, ya que solo cuenta con 28 suites. Aunque es pequeño, la atención a los detalles es ilimitada. Cada villa fue amueblada a la medida por District 8 e incluye bañeras de mármol y pisos de baldosas.
El viñedo se ubica en el corazón del sur de Francia, una zona conocida por su clima cálido y luz increíble; además, es una región que ha atraído a numerosos pintores a lo largo de la historia por sus hermosos paisajes. Para relajarte, puedes comprar una botella de vino para llevar en la adorable tienda o para disfrutarla en la terraza del restaurante (los sabrosos bocadillos incluyen pescado fresco, un excelente paté y deliciosa carne de res).
Muy pocos viñedos ofrecen tanto como Château La Coste, un destino en el que se es posible experimentar un estilo de vida soñado que no raya en lo pretencioso ni en costos exagerados. Aquí disfruté de una excelente comida, un vino fantástico, una hermosa vista y mucho espacio para ejercitarme y caminar.