CONTANDO HISTORIAS A TRAVÉS DE LA MODA
Por: Sarah Gore Reeves
Omar Salam siempre ha sido un narrador de historias, su forma preferida de hacerlo es en SUKEINA, la marca de moda que fundó hace más de 10 años. Este particular sello no busca solamente vestir a los que lo portan, sino permitirles evocar emociones y experiencias a través de sus complejas piezas. El diseñador senegalés combina la cosmología de África, la estética de Europa y el lienzo de la reinvención que es América para cambiar positivamente nuestra forma de ver la moda.
En conversación con M de Milenio, Omar muestra su naturaleza rebelde e inconformista, y cuenta cómo llegó a crear una marca que ha sido descrita como “el secreto mejor guardado” del mundo de la moda.
Estudiaste guionismo, ¿consideras que te ayudó a contar tu historia en la moda?
La escritura de guiones y el diseño de moda son medios completamente diferentes, pero comparten la capacidad de transmitir una historia y de llevarnos por un viaje ficticio. Soy muy consciente de que mi formación es lo primero que influye decisivamente en mi práctica. En SUKEINA, aunque las siluetas suelen ser escultóricas y tridimensionales, hay una cadencia y una linealidad constante que evoca al guionismo.
¿La ropa funciona como una armadura?
En mi opinión, no es ni una armadura ni un equipo de protección. Al contrario, creo que es una oportunidad para expresar, ilustrar o transmitir lo que ocurre dentro de la mente, el corazón y el cuerpo. Al vestir, se puede cubrir el físico para descubrir la psique. La ropa puede utilizarse para revelar lo más singular de la esencia de alguien, cómo se siente y quién es.
¿Cómo logras empoderar a las mujeres manteniendo su feminidad?
Yo no empoderé a las mujeres. Siempre han sido poderosas y, lo que es más importante, empoderadoras. Lo que hacemos en SUKEINA es, a través de las prendas, enfatizar y resaltar lo que ya está ahí, y evidenciarlo de manera más inmediata para quien lo lleva y para el mundo en general.
¿Cuál es el mensaje de SUKEINA?
"Tu mayor regalo a la humanidad es tu yo más único, esencial y auténtico".
Después de trabajar con marcas como Christian Lacroix y Sonia Rykiel, ¿en qué momento te sentiste preparado para emprender por tu cuenta?
Después de trabajar con estas dos grandes casas y aprender de cada una de ellas, me di cuenta de que mi propia voz propia sólo se puede pronunciar correctamente en mi propia lengua. SUKEINA es mi lengua y a través de esta cuento una historia nueva.
¿De qué maneras es distinto trabajar en París y trabajar en Estados Unidos?
París saca lo mejor de los sueños. Los colores naturales, los olores, los alimentos y el sonido hacen de Francia el lugar ideal para potenciar una capacidad de expresar y de crear que es realmente asombrosa. Por otro lado, Estados Unidos es excelente para llevar todo a cabo en un sentido más concreto, real y práctico, siempre de una manera increíblemente amable e indulgente. Puedes experimentar una y otra vez hasta que consigues lo que quieres a la perfección. Creo que estos dos elementos se complementan al momento de crear una gran oferta.
Sukeina significa luz brillante, pero también es el nombre de tu madre, ¿qué has aprendido de ella?
Todo lo bueno que sé, lo aprendí de ella; sobre todo que la bondad puede ser inteligente, estructurada y disciplinada. Sigo encantado por la forma en la que su mente trabajaba mano a mano con su corazón para crear soluciones compasivas, innovadoras y hasta esclarecedoras en todo aquello en lo que participaba.
Sueles utilizar todo tipo de materiales en tus diseños, ¿puedes hablarnos de las constantes combinaciones que haces?
Trabajo con materiales opuestos en cuanto a comportamiento y tacto. Mi objetivo es crear un contraste que le dé vida a lo que quiero enfatizar, pero con una delineación clara. Quiero provocar una reacción, despertar los sentidos y crear siluetas que no simplemente abracen la forma humana, sino que aludan a lo que el cuerpo es capaz de hacer. No creo que el mundo necesite otro diseñador que siga las mismas siluetas que ya se han hecho una y otra vez. Esa es la razón por la que nos sentimos muy vigorizados en nuestra búsqueda perpetua de crear prendas que se dirijan a lugares en los que la moda aún no ha estado.
¿Alguna organización benéfica con la que trabajes?
Un programa muy cercano a mi corazón es el Youth Anxiety Center del Hospital New York Presbyterian, en el que están comprometidos a luchar contra la epidemia de ansiedad y depresión en adolescentes y adultos jóvenes.
Su sitio web es https://www.nyp.org/youthanxiety.
