En la moda, el paso del tiempo no es solo un marcador de temporadas o tendencias; es un diálogo silencioso entre el pasado y el presente, un puente entre épocas que se refleja en las piezas que usamos y en la manera en que expresamos esos pensamientos que no sabemos traducir en palabras. “Los cimientos de cómo las mujeres se visten hoy, y en muchos sentidos, cómo pensamos, están en los años 20. Se trata de modernidad en estilo y actitud”, reflexiona Kim Jones en un comunicado oficial, el Director Artístico de Alta Costura y Moda Femenina de Fendi. Esta afirmación encapsula el espíritu detrás de la colección del centenario de la firma italiana, un patrimonio e innovación que se remonta a 1925. En un año que vio hitos no solo en la moda, sino también en la literatura, el arte y la cultura, Fendi surgió como un símbolo de sofisticación atemporal, su nombre vinculado para siempre con el espíritu modernista de la época.

A medida que Fendi se acerca a su 100º aniversario, la colección presentada esta temporada es una celebración de este legado. Es un recordatorio de que la moda no se trata solo de la estética, sino de las vidas que toca y de la historia que lleva adelante. Con esta colección, Jones ha fusionado ingeniosamente la Alta Costura con el prêt-à-porter, uniendo elementos artesanales y hechos a máquina, combinando vestuario de noche y de día. Es una elevación de lo cotidiano, la encarnación del compromiso continuo de Fendi con el lujo y la practicidad, con un guiño a las mujeres que inspiran la casa. "Fendi siempre es consciente de las mujeres que hacen en lugar de solo ser", argumenta Jones, y esta conciencia se traduce en ropa que permite el movimiento, la facilidad y la navegación fluida en la vida contemporánea.

Hay una dualidad en la colección que habla tanto de estructura como de fluidez. Los bordados, delicadamente hechos a mano, se aplican a piezas arquetípicas como la simple camiseta y el vestido lencero, transformando lo ordinario en algo extraordinario. Los vestidos de té de seda y los vestidos de bailarina emanan una sensación de ligereza, pero están firmemente anclados, tanto metafórica como literalmente, por botas creadas en colaboración con Red Wing. Esta unión improbable de la alta moda y el calzado utilitario es un guiño a la mezcla característica de Fendi entre practicidad y elegancia. La bota Classic Moc de Red Wing, un elemento básico masculino desde 1952, se reimagina con el cuero Cuoio Romano de Fendi y las costuras hechas a mano Selleria. El resultado es una bota que es tanto una declaración de artesanía como una pieza de moda, que lleva consigo el peso de la historia mientras avanza con confianza hacia el futuro.