La llegada de los Juegos Olímpicos a París ha sido una inspiración para la creatividad de Maria Grazia Chiuri, directora creativa de Dior, para la colección de Alta Costura Otoño / Invierno 2024. La creativa ha tomado esta gran oportunidad para tomar como homenaje a los atletas de todas las épocas que han superado innumerables prejuicios y obstáculos, promoviendo la igualdad en las competencias deportivas. En esta colección se explora la relación que existe entre la ropa y la libertad de movimiento por lo que se cuestiona la esencia de la vestimenta y su construcción.

Mediante la pasarela se pueden apreciar drapeados que se presentan como una referencia visual a las esculturas grecorromanas. Los vestidos de seda están realzados por bordados mientras que los tank tops metálicos transparentes y los conjuntos en los que la falda deja ver los pantalones con cada paso, capturan toda la atención. Las siluetas reflejan tanto el poder experimental como el reflexivo en la alta costura, representando a una mujer fuerte y delicada al mismo tiempo.

El escenario elegido para el desfile fue los jardines del museo Rodín en París, que por unos momentos se transforman en un Monte Olimpo moderno. Ante los ojos de la prensa, clientes, invitados y amigos de la Maison Dior, las figuras de diosas como Hera, Afrodita, Atenea y Hestia cobraron vida, encarnadas en modelos que desfilaron con prendas inspiradas en la túnica grecorromana.

En consonancia con el espíritu olímpico, las paredes del espacio fueron decoradas con mosaicos que representaban diferentes deportes como el golf, el surf, el patinaje sobre hielo, el rugby y el fútbol. Estos mosaicos también evocaban a la Villa Romana del Casale en Sicilia, famosa por sus mosaicos de mujeres atletas. Esta ambientación marca la coherencia con la temática de las prendas y de la alta costura con la tradición atlética.