¿Qué te inspiró a correr el riesgo de crear tu propia marca?

Durante la pandemia viví con mis papás en Punta Mita. Pasé meses totalmente desconectada del mundo, pero conectada con el mar, y me di cuenta que es una parte esencial de mí. Como blogger había llegado a un punto en el que me sentía lista para diseñar mis propias prendas para mis seguidores y me hizo sentido que fueran trajes de baño. Después de hacer una maestría en Fashion Entrepreneurship & Innovation en Londres, tenía las bases de manufactura, administración y finanzas, por lo que al regresar a México en noviembre de 2022 me sentí lista para crear Lagoona. Ese mismo diciembre ya había salido la primera colección.

Aunque el mercado de trajes de baño es enorme, existen pocos diseños que sean favorecedores y confortables para todos los cuerpos. ¿Tuviste dificultades al balancear la estética con comodidad?

Como mujer diseñando para otras mujeres, nunca había tenido tan clara la diversidad de nuestros cuerpos. Diseñar una prenda que, por su naturaleza, es reveladora sin que deje de ser cómoda ha sido un reto enorme, y todavía tengo mucho que aprender. Al final, quiero lograr que mi marca empodere a la mujer a sentirse sexy, elegante, y divertida en su propia piel.

Todas las prendas están fabricadas con ECONYL®, un tipo de nailon regenerado hecho con desechos que puede ser reciclado y remoldeado. ¿Por qué elegiste este material?

Cuando conocí el ECONYL® me enamoré de la hermosura del proceso. Ellos se dedican, junto a otras organizaciones, a limpiar el mar, sacando redes de pesca y otros plásticos, y los convierten en telas de la más alta calidad que han usado marcas como Prada o Adidas. Me pareció el círculo perfecto: ayudar a limpiar el océano para hacer una prenda que se usa para disfrutar del mar, y así seguir enamorándonos y cuidando de nuestro planeta. Esa fue nuestra primera manera de practicar la sostenibilidad en la marca, y también siendo 100% libres de plástico con nuestros empaques.

¿Cómo garantizan un proceso de fabricación con condiciones éticas?

El proceso de búsqueda para la manufactura fue muy largo. Sabía que necesitaba encontrar un taller que garantizara tanto alta calidad en el producto como condiciones éticas para las personas que fabricaran las prendas. Me encantó la idea de producir en el taller que elegí de Colombia, ya que emplean a mujeres que proveen para sus familias, y al mismo tiempo apoyamos a la economía de Latinoamérica.

¿Qué puedes contarnos sobre la campaña de BAJO EL SOL, su más reciente colección?

Estas últimas fotos las hicimos en el Hotel Las Brisas Acapulco con un equipo increíble: Juan Hernández, Fernanda Ortiz, Emilia Roch, Nico Meehan y yo. Es una colección cálida, introduciendo naranjas, rosas, blancos y negros. Como creadora de contenido y emprendedora, una de mis partes favoritas de trabajar en el mundo de la moda es la dirección creativa, de la que fui responsable para la campaña. Creo que tengo un buen ojo para captar tendencias anticipadamente, bajar el concepto y hacer la dirección creativa de cada colección, eso es lo que más me emociona.

¿Cómo ha evolucionado la marca desde su creación y cómo visualizas el futuro crecimiento de Lagoona?

Sé que con cada colección vamos a ir mejorando. Actualmente solo vendemos en nuestra página web y hacemos pop-ups en diferentes ciudades de México. Me encantaría expandir el equipo para poder crecer la marca y llevarla a un nivel internacional. La meta es poder vender en marketplaces como Revolve, Ssense o Net-a-Porter, y llegar a muchas más personas. Actualmente estamos trabajando en nuestra próxima colección, que tiene un giro completamente nuevo y va a estar increíble. Stay tuned!