LEWIS HAMILTON DISEÑA UNA EDICIÓN LIMITADA DEL RELOJ PORTUGIESER DE IWC SCHAFFHAUSEN
Por: M Revista de Milenio
Imágenes: cortesía de la marca
Lewis Hamilton no sólo es uno de los deportistas más consumados del mundo del motor, sino que también se ha ganado una reputación por su estilo personal y sus atuendos icónicos. El piloto del equipo Mercedes-AMG PETRONAS Formula OneTM suele ir más allá de los límites con sus elecciones de moda, adoptando colores atrevidos, estampados y diseños originales. El embajador de la marca IWC ha vuelto a unir fuerzas con Christian Knoop, Jefe de Diseño de IWC, y su equipo para diseñar su tercera edición especial de relojes. "Ha sido un honor y un placer trabajar con Lewis en este proyecto. Su pasión por IWC y su amplio conocimiento de los relojes mecánicos fueron palpables en cada etapa del proceso de desarrollo de dos años. Lewis sabía exactamente lo que quería y aportó excelentes ideas. El resultado es un reloj que combina su infalible sentido de la estética y su amor por los colores vivos con una de las mejores tecnologías relojeras jamás desarrolladas en Schaffhausen", explica Christian Knoop, Jefe de Diseño de IWC.
El Portugieser Tourbillon Rétrograde Cronógrafo Lewis Hamilton (Ref. IW394008) cuenta con una caja de 43,5 milímetros de platino, el más raro, puro y precioso de todos los metales. El brillo blanquecino del platino complementa a la perfección la esfera de color verde azulado, adornada con 12 brillantes diamantes. Con indicadores ligeramente rebajados para el cronógrafo y la fecha retrógrada, la elaborada esfera tiene un aspecto escultural. También presenta el logotipo de los siete veces campeones del mundo de F1TM, que se asemeja a los ojos de una pantera. El reloj lleva una correa textil a juego con cierre desplegable.
Lo más llamativo de la esfera es el tourbillon volante de minutos de pirateo situado a las 6 horas. El tourbillon, que en francés significa "torbellino", consiste en un volante que gira alrededor de su eje en una pequeña jaula. Esta rotación constante no sólo ofrece un espectáculo visual en la esfera, sino que también reduce la influencia de la gravedad en el sistema oscilante, aumentando la precisión del reloj. Gracias a la parada integrada del tourbillon, el mecanismo puede detenerse por completo, lo que permite al usuario ajustar la hora con una precisión de segundos. Compuesto por 56 piezas individuales y con un peso de sólo 0,675 gramos, el delicado mecanismo es increíblemente difícil de ensamblar para un relojero.
El Portugieser Tourbillon Rétrograde Cronógrafo funciona con el calibre 89900 de la manufactura IWC, que también cuenta con una función de cronógrafo. Las horas y los minutos parados se muestran en un contador situado a las 12 horas, lo que permite una lectura fácil e intuitiva del tiempo transcurrido. Otra característica es la indicación retrógrada de la fecha.